Tan sonoro es, que no se escucha a lo lejos y cuando estás
cerca, tus oídos... no lo sienten.
Es fascinante escucharle, es realmente exquisito cuando
logras hallarle.
La sensación es indescriptible, cuando encuentras el punto más
alto en el que puedes oírle.
No es tan fácil como parece, no es tan simple como se ve, no
se logra con sólo callarse ni tampoco cuando anhelas tanto el querer saber si
puedes escucharlo.
No logras escucharlo cuando a solas te encuentras ni mucho
menos cuando tu mente se despeja.
No logras entenderlo ni en el ímpetu de su melodía, en ese
compás tranquilo que armoniza.
¿Cómo describirlo? Si cada vez que intentas percibirlo, se
escucha un suave latido.
Tenue silencio, cómo murmuras tan callado, cuando sin querer
me despierto.
© Lilu (Liliana Stafé)
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